Juicios de faltas

El viernes pasado un juez nos invitó a ir hoy al juzgado a ver unos cuantos juicios de faltas que tenían acumulados, como no tenemos vida y nos aburrimos un montón, hemos ido S, O y yo.

Cuando subíamos nos hemos cruzado con el fiscal (que es nuestro tutor de prácticas) y nos ha llevado con él a la sala porque le tocaba a él encargarse de las faltas.

Tanto el juez como el fiscal han sido todo un encanto con nosotras, parecían felices de tener club de fans y se lanzaban halagos entre ellos y alguna que otra puyita chulesca mientras nosotras sonreíamos medio incómodas.

La verdad es que ha sido divertidísimo. Hemos quedado en volver dentro de un par de semanas a una guardia (a la que obviamente también nos han invitado) y planeamos llevar coca-colas y palomitas por lo menos, porque aquello es mejor que el cine… (una pena que quedara tan mal, que sinó…).

Los asuntos, eran… curiosos, la forma de llevarlo también, los testimonios… ni te cuento.

Un denunciante al que habían abierto la cabeza con un cristal le rogaba en un semicastellano casi inentendible al fiscal que no pidiera pena para el agresor… suerte que luego el fiscal nos ha explicado que se trataba de un tipo que se había saltado el ramadán y no quería que el imán se enterara, porque sinó, me parece que no entendíamos un pijo.

Luego una equivocación, han hecho venir a un pobre señor desde Valencia, denunciado cuando el tipo no tenía nada que ver…

Un idiota que iba tan fumado que sacó la cabeza por la ventanilla y se puso a insultar a la policía porque según palabras textuales “Él en la calle insultaba a quién le daba la gana”. Sin duda insultaba a quién le daba la gana, pero los 600 € de multa los tendrá que pagar igual… por listo.

Luego el fiscal y el juez en plan majérrimo nos han invitado a un café y nos han colado en juicios de verdad de la buena.

Una violencia doméstica… una interesante charla entre la abogada y la fiscal y lo mejor de toda la tarde. Un tipo que decía que se había bebido ni más ni menos que 25 cubatas de Whisky pero que aún así el no se conformaba con los hechos y que quería prestar testimonio…

25 cubatas de Whisky madre del amor hermoso… sigo pensando que alguien que se beba 25 cubatas de Whisky tiene que estar en plena catarsis por lo menos…

Luego nos ha rescatado el fiscal y hemos vuelto con las faltitas.

Un ex matrimonio se tiraba los trastos a la cabeza porque no se sabían repartir al hijo… el fiscal a viva voz y en pleno procedimiento ha gritado ESO ES UNA CACA DE LA VACA… y nosotras nos desternillábamos silenciosamente… El fiscal les ha metido un chorreo importante y hale.

Luego una pareja de jovencitos, él esposado y con poli, ella con pintas alolailadas… y un coche hurtado. La versión de la chiquilla, ella iba por la calle, vio un coche que no estaba con el  cerrojo, mando el novio pa’lante y lo abrió cogió unas gafas de dentro, no  le gustaron, se las enseñó al novio y las devolvió a su sitio… La frase

Juez: ¿Es que usted se va fijando en los coches que tienen los pestillos abiertos?

Denunciada: Pues sí…  (Como si fuera lo más normal del mundo)

Juez: Pues sí que es usted observadora…

Denunciada: claro.

Aisshhh…

Luego uno un poco más serio y complicado de explicar. Así que saltémoslo y finalmente un grafitero…

El caso es que ha sido un día muy divertido y sin duda alguna, la realidad siempre supera a la ficción.