(Puede haber espoilers, pero no nos hacemos responsables).
Hola, desocupados lectores de este blog. Hemos hecho golpe de estado así que ahora somos Cami y Paps detrás de esta edición, dispuestas a revelar la verdadera naturaleza (retorcida) de su dueña.
Recientemente, Taqwa nos ha recomendado una serie de libros y nosotras, muy confiadas, hemos decidido hacerle caso. El comienzo del descubrimiento fue Mujercitas. Primero empezó a leerlo Paps y, viendo lo enganchadísima que estaba, lo agarré yo también. A ver, Mujercitas es un libro precioso, yo no voy a negarlo, pero tiene un par de detalles que debieron hacernos sospechar de la naturaleza los problemas mentales de la persona que hizo la recomendación. (Yo no coincido... Mujercitas es horrible. Sólo te hace sufrir. Mucho.)
Claramente, cuando Paps llegó a la parte retorcida del libro, tuvo la debida charla con Taqwa, pero yo lo ignoraba (junto con muchas otras cosas de las que también hablábamos... Nada tan sobrecogedor como Cami opinando sobre lo linda que era la pareja, o lo adorable que es Beth...), así que cuando me tocó a mi leer esa parte fui corriendo a gritarle. Y es que no es para menos. Para que todos sepan de qué estamos hablando, voy a poner la cita que marca el problema:
«Durante una de sus ensoñaciones, la palabra "fraternal" le hizo sonreír y, mirando el retrato de Mozart que tenía delante, pensó: "Mozart era un gran hombre, y cuando no pudo obtener a una de las hermanas, se quedó con la otra... y fue feliz.»
«Durante una de sus ensoñaciones, la palabra "fraternal" le hizo sonreír y, mirando el retrato de Mozart que tenía delante, pensó: "Mozart era un gran hombre, y cuando no pudo obtener a una de las hermanas, se quedó con la otra... y fue feliz.»
Entonces así, va él y decide que, ya que Jo no le da bola, casarse con su hermana menor es la mejor opción. No es que yo no lo entienda, que sé que él moría de ganas por pertenecer a esa familia y todo, pero... esto no tiene ningún sentido. Y el hecho de que Taqwa lo encuentre normal y hasta lógico, nos hace plantearnos muchos interrogantes entender muchas cosas. A Taqwa, de chiquita, la rompieron. Concretamente, le rompieron el corazón. A los 7 años. Todo es culpa de Mujercitas. Lo que yo no termino de entender es porqué odia a Jo, y no a todos los demás. Eso es lo más preocupante: que decida odiar a Jo y no a Laurie, por elegir quedarse con la hermana, y a Amy, por ser una atorranta que se tira de cabeza con tal de casarse con un tipo lleno de plata.
No obstante, decidí hacer caso a otra de sus recomendaciones, porque pese a los disgustos, Mujercitas me gustó. Allá fue ella y me dice que lea “La casa de los espíritus” de Isabel Allende, que por demás, es un libro aburridísimo, al menos el primer 25%. El problema empieza temprano aquí... Va uno por el tercer capítulo y le sueltan la siguiente perla:
«Había ido a visitar a la familia Del Valle para ver si les quedaba alguna hija soltera, porque con tantos años de ausencia y tantos de barbarie, no sabía por dónde comenzar a cumplir la promesa hecha a su madre de darle nietos legítimos y concluyó que si Severo y Nívea lo aceptaron como yerno en los tiempos de Rosa la Bella, no había ninguna razón para que no lo aceptaran de nuevo.»
Y entonces empecé a encontrar un patrón. Como ella misma lo dice, éste es uno de sus libros favoritos. El hecho de que el protagonista vaya y se case con la hermana menor de su prometida muerta revela un poco más de la enfermedad de esta mujer.
Taq nunca ha sido una chica romántica, más bien todo lo contrario, pero ahora tiene sentido que lo sea.
Para rematar esas dos pruebas de las ruinas que tiene Taq como corazón, simplemente leyendo la reseña de otro libro que nos había recomendado encontré otro error más en la lista de sus lecturas favoritas: Como Agua Para Chocolate. Pedro y Tita se quieren casar, pero Tita tiene que cuidar de su madre, entonces él se termina casando con la hermana mayor. TODO MAL.
Como Paps explicó, el problema no son las lecturas en sí mismas, sino el hecho de que ella considere que esa manera de proceder sea correcta. ¿Para qué leería alguien una novela que va a mostrarle lo miserable que es la vida amorosa, y concluir en que si no podés estar con quien querés tenés que quedarte con su hermano? Nada lógico, nada lógico... Yo no entiendo y creo que nunca entenderé.
Con lo expuesto previamente (?) tenemos para pensar un rato. No es normal que sus lecturas favoritas sean esas que te rompen el corazón, de la misma manera que no es normal que ella considere normal la manera que tienen de proceder los protagonistas masculinos. Lo cual nos lleva a relacionar estas conductas con las suyas propias en cuanto a las relaciones interpersonales. Todos sabemos muy bien que pedir consejos sociales a Taq es un error gravísimo, solo espero que no termine casándose con el hermano de algún novio... (y eso porque no tiene hermanas, que si no casarse con algún ex de ellas sería otra opción (y esto también tiene que ver con sus escasos esfuerzos lamentables intentos para entablar relaciones sociales con desconocidos))
Te queremos, Taq... Aunque seas una enferma.
Edición posterior: Gracias por recordármelo, me olvidé mencionar el primer libro que me recomendó este año. El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares, que está muy bien hasta que te das cuenta que el prota va y se enamora de la novia de su abuelo. Esto, señores, es la tapa.
Edición posterior: Gracias por recordármelo, me olvidé mencionar el primer libro que me recomendó este año. El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares, que está muy bien hasta que te das cuenta que el prota va y se enamora de la novia de su abuelo. Esto, señores, es la tapa.